Artículo - Veganismo versus alimentación basada en plantas y por qué adoptarlas
En la entrada anterior he explicado el significado de veganismo. El veganismo es un estilo de vida que busca excluir, en la medida de lo posible y practicable, todas las formas de explotación y crueldad hacia los animales utilizados para cualquier propósito. Sin embargo, muchas personas creen que esta práctica es simplemente una dieta. Por eso, quisiera hablarles de la diferencia entre ser vegano y llevar una alimentación basada en plantas y las diferentes razones por las que alguien podría decidir adoptar una u otra.
En principio, la principal diferencia es que la alimentación basada en plantas se limita justamente a alimentos. Por lo general, las personas veganas adoptan una alimentación basada en plantas como consecuencia del rechazo a los productos derivados de la explotación animal. Sin embargo, no funciona así a la inversa: no todas las personas que llevan una alimentación basada en plantas son veganas. Alguien puede decidir basar su dieta en plantas por motivos diversos (ecológicos y nutricionales, principalmente), motivos que no necesariamente tienen que ver con la compasión por los demás animales y no excluyen, por lo tanto, el uso de animales para otros fines (ropa, cosméticos, entretenimiento, transporte, etc.).
Una de las razones más comunes por las que alguien puede basar su alimentación en plantas es el medioambiente. Hay muchas razones relacionadas con la producción de alimentos derivados de explotación animal por las cuales una alimentación basada en plantas puede contribuir en este sentido. Por ejemplo, el mal uso del agua para este fin. Se calcula que para producir una hamburguesa de vaca se necesitan más de mil litros de agua. Un estudio apoyado por la Universidad de Michigan encontró que, con el agua que se necesita para producir 312 hamburguesas de carne roja, se pueden producir 60.937 “Beyond Burgers" de la compañía Beyond Meat.
Por otro lado, la ganadería ocupa el 30% de la superficie terrestre del planeta y un 33% de toda la superficie cultivable. Esos números irán en aumento y se continuará talando árboles (como ya ha sucedido con al menos el 70% de la superficie deforestada en el Amazonas), ya sea para producir alimento para los animales o para colocar a esos animales. Estas son dos de las razones principales por las cuales una alimentación basada en plantas es mucho mejor para el medioambiente. Sin embargo, no he hablado del transporte de estos animales, de los pueblos indígenas desplazados (que cuidan sus hogares de forma sustentable y amigable con el ecosistema) o de los gases producidos por los animales en sí.
Otra razón un poco menos altruista para adoptar esta dieta es la propia salud. De más está decir, primero que nada, que las instituciones más importantes de nutrición están de acuerdo en que se puede llevar este tipo de alimentación de forma saludable en cualquier etapa del ciclo vital, incluidas madres embarazadas y lactantes y deportistas de alto rendimiento (abajo incluyo una lista de todas las instituciones). ¡Pero no solo eso! La alimentación a base de plantas se ha relacionado con beneficios en la prevención y mejora de diferentes tipos de cáncer (de colon, de próstata, de mamas), diabetes, enfermedades cardiovasculares y degenerativas. Claro que es recomendable asesorarse con un profesional de la salud (como con cualquier otra dieta), pero los beneficios son innegables.
Como dato curioso, para quienes creen en energía y karma, hay una razón más para llevar este tipo de dieta. Al provenir los productos de origen animal de lugares en donde hay familias destrozadas, estrés, tortura, abuso y muerte, sería lógico pensar que no queremos introducir en nuestro organismo materia impregnada de una memoria celular tan nociva. Esto es más difícil de demostrar o medir científicamente, pero no lo hace menos real para quienes sienten que esto tiene sentido. Así, pues, hay quienes optan por consumir "alimentos vivos" por razones más relacionadas con su religión o creencias.
Una vez mencionadas las principales razones por las que una persona podría decidir adoptar una alimentación basada en plantas, llegamos a una conclusión que, a mí por lo menos, me sorprende cada vez que pienso en eso. Básicamente, ¿llevar una forma de vida vegana es mejor para mi propia salud, el bienestar de los demás animales y el planeta que habitamos? La respuesta no te sorprenderá. Las industrias nos han llenado de mitos pero una vez que investigamos y lo vivenciamos por nosotros mismos, nos damos cuenta de que los beneficios son extremadamente más numerosos que las posibles desventajas que no nos atrevemos a cuestionar.
En conclusión, ya sea que decidas llevar una alimentación basada en plantas o una vida completamente vegana (prestando atención también a la ropa, cosméticos, transporte y entretenimiento que consumes), estarás haciéndote un favor, así como a los animales y al mundo a tu alrededor. ¡Anímate a informarte y a tomar la decisión!
La ganadería produce más gases contaminantes que el transporte | Noticias ONU (un.org)
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